La lectura del tarot es una de esas actividades que seguramente causará mucha curiosidad entre quienes se ven atraídos por el mundo del esoterismo, y una buena noticia al respecto es que para introducirnos en la lectura del tarot existen ciertas pautas básicas que en caso de seguirlas de una manera estricta pueden traer consigo buenos resultados para quien se anime a ello, por lo pronto, lo más importante es contar con una baraja a la mano para comenzar.

Es recomendable comprar la baraja de Marsella, además de hacernos con 22 arcanos mayores y 56 menores, después de ello tendremos que disponernos a la adquisición de un libro de tarot en el que se explique de manera detallada la disposición de cada una de las cartas que conformarán la baraja, teniendo en cuenta que en ciertas ocasiones esos libros de introducción a la lectura de cartas sueles estar acompañados de una baraja, por lo que nos ahorrará algo de tiempo.

De tal modo, el primer consejo básico es dedicar un día de estudio para cada una de las cartas, siguiendo las regla básicas que el libro vaya mencionando y al tiempo irnos inmiscuyendo en los más pequeños detalles de la carta, como por ejemplo el simbolismo oculto que posee cada una de las cartas que componen nuestra baraja.

Al tener claro lo anterior podremos pasar a la primera tirada, donde recomendamos que se trate de una tirada simple, para ir complicando las cosas a medida que mejoremos nuestras habilidades y así considerar en esa primer tirada el pasado, el presente y futuro. Como consejo para empezar en la lectura de cartas es aconsejable la cruz celta, que consiste en ubicar dos cartas en el centro y cuatro cartas tanto a la izquierda como a la derecha para así involucrar cada una de las cartas en su conjunto y practicar nuestra lectura.